Antonio Taveras Supera el Legado de Cristina Lizardo en Solo 3 Años de Senaduría
El senador Antonio Taveras ha logrado un avance significativo en apenas tres años de gestión, superando notablemente el legado de su predecesora, Cristina Lizardo, quien ocupó el cargo durante tres periodos consecutivos.
A pesar de comenzar su mandato en medio de la pandemia, Taveras ha demostrado un compromiso excepcional y una eficacia legislativa sin precedentes.
Aun cuando es reconocido que en «amarres políticos» no ha sido muy correcto por inexperiencia y ser parte de un partido que por diáspora no siempre le ha apoyado, además, pésima prensa y difusión de su labor en estos años, la ejecutoria de Antonio es muy superior a la de Lizardo quien nadie recuerda haberla visto en la calle, como Antonio, representando.
En el ámbito legislativo, Antonio Taveras ha sido fundamental en el impulso de importantes leyes que durante años estuvieron estancadas en tiempos en que Cristina incluso fue presidente del senado, tales como las relacionadas con el Ordenamiento Territorial y la Extinción del Dominio. Su capacidad para enfrentarse a fuerzas oscuras y negociantes en el hemiciclo ha sido reconocida y admirada, destacando su determinación para promover cambios significativos en beneficio del país y su gente.
Además de su labor legislativa, Taveras se ha destacado en la representación de los intereses de la provincia. Ha abordado de manera prioritaria el tema de las titulaciones de tierras, buscando soluciones para aquellos que se encuentran en situaciones de desahucio. Asimismo, ha sido un ferviente promotor de eventos deportivos provinciales, demostrando un compromiso genuino con el desarrollo integral de la comunidad.
En contraste, los ciudadanos de la provincia apenas recuerdan acciones significativas realizadas por Cristina Lizardo durante su larga trayectoria como senadora. Su gestión se ha caracterizado por la inacción y la falta de iniciativas concretas para impulsar el progreso de la provincia.
La cruda verdad sin inclinaciones partidistas, demuestran que Antonio Taveras ha sido buen senador, cuyo desempeño ha superado con creces el legado de su predecesora. Mientras Taveras continúa trabajando incansablemente en beneficio de la provincia, que Cristina Lizardo quiera volver al Senado, plantea interrogantes sobre su capacidad para generar un cambio significativo después de un historial de inactividad y falta de resultados.
